Interior
Bella Vista

Familias que quedaron aisladas por las lluvias recibieron asistencia municipal

Funcionarios de Bella Vista recorrieron y asistieron a vecinos de zonas afectadas por las lluvias.

Autoridades municipales de Bella Vista se reunieron con vecinos de Carrizal Norte para verificar el avance de las obras de recuperación del camino de acceso desde el kilómetro 40 de Ruta 27. En el lugar también comprobaron el funcionamiento de un nuevo tanque de agua potable para provisión a 6 familias del sector.

El intendente Walter Chavez y el responsable de obras públicas municipales, ingeniero Gastón Carcaño se reunieron con vecinos de Carrizal Norte con el objetivo de observar el avance de las obras de recuperación del camino vecinal de acceso que fuera totalmente destruido por las lluvias. La zona había quedado aislada contando apenas con una salida alternativa por senderos hacia el barrio EPAM Norte.

Por ello, el equipo de Infraestructura inició una obra de recuperación del camino vecinal con motoniveladora que en estos momentos avanza hacia el bajo moviendo suelo y consolidando la traza que en algunos tramos fue invadida por la densa arboleda. "No es un trabajo sencillo porque hay que hacer los espacios para que entre la máquina y hay lugares donde el agua hizo barrancos peligrosos", señaló el técnico municipal.

Ambos funcionarios dialogaron con los vecinos comprobando por otra parte el funcionamiento de un tanque de agua potable instalado recientemente en un esfuerzo conjunto de las seis familias del lugar con el gobierno local. Hasta allí debieron llegar también las redes eléctricas; instalaciones que fueron ejecutadas hace más de un año, según comentaron los vecinos.

Ramona, una vecina de 52 años relató que “hace 25 años que vivo en este lugar y siempre nos manejamos con agua de manantiales pero cuando llovía las aguas bajaban con distintos colores que arrastraban químicos de las chacras de más arriba”, señaló la mujer en referencia a cultivos hortícolas de la zona.

“Ahora gracias al intendente Walter ya tenemos un tanque de 1.100 litros con una bomba a 30 metros que usamos para tomar y para la comida. El viejo manantial sigue funcionando pero esa agua la usamos para lavar las ropas y darle a los animales”, comentó la vecina agradecida mientras convidaba unas tortas fritas.

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