El altercado había iniciado cuando los dirigentes del PJ y del Partido de la Victoria decidieron acordar la conformación de un frente con fuerzas políticas provinciales y sectores más cercanos a las ideologías de la ultra derecha, como el Partido Liberal y el Frente Renovador.

Las demás organizaciones que integraban el Frente para la Victoria consideraron que, al ser mayoría, tenían derecho a utilizar el sello y fue así que inscribieron a sus candidatos bajo esa denominación.

Pero una jueza electoral, María Herrero actuó “de oficio” y prohibió el uso de las palabras “frente para la victoria” para la designación de coaliciones en un fallo que fue interpretado como una proscripción.

Ante esto los grupos partidarios afectados apelaron la medida ante la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso, Administrativo y Electoral de Corrientes y las juezas Nidia Billinghurst de Braun, Mirtha Helia Altabe de Lértora y Mirtha Herminia Puig revocaron en su totalidad el fallo de primera instancia y le otorgaron el Frente para la Victoria a las 6 organizaciones que integran esa alianza.

Así las cosas el sector más arcaico de la política encabezado por los referentes del Partido Justicialista agacharon la cabeza y anotaron al frente “Haciendo Corrientes”. Esta lista propone reeditar la dupla Fabián Ríos (PJ) y Ana Pereyra (Partido Liberal) para intendente y vice.

Integran esta coalición el Partido Nuevo, el Movimiento Integración y Desarrollo, el Partido Demócrata Cristiano, Movimiento Siempre Corrientes, Crecer con Todos, Partido Renovador Federal, Cambio Popular, Partido de la Victoria, Partido Proyecto Popular, UCeDe, FORJA, Ladrilleros Unidos y La Cámpora.

Pero la decisión jurisdiccional tiene una trascendencia más importante que sólo el uso del nombre, porque como los jueces tienen competencia provincial la designación del sello también es válido para las elecciones a gobernador que serán casi a fines de año.

Es por ello que para los grupos autodenominados “kirchneristas duros” el uso exclusivo de la nominación tiene un valor inestimable, ya que les posiciona en una buena situación al momento de negociar candidaturas a nivel provincial, cuando Carlos "Camau" Espínola se inscriba como candidato a gobernador en las votaciones que también se elegirán legisladores. La intención sería trocar lugares elegibles en las nóminas a diputados y senadores a cambio del uso de la identificación del frente partidario.

Intentos por ocultar una interna sangrienta

Una discusión por un amor no correspondido hace cuatro décadas trajo a colación una suma dineraria de un préstamo de antaño, temas que se sumaron a la disputa por un cuarto lugar en una lista de concejales.

El debate fue entre un militante radical y un dirigente del partido Propuesta Republicana, ambos de la localidad de Esquina.

La disputa terminó en un escándalo provincial generado por la reacción violenta del referente del PRO, Alfredo Strugo quien usó una botella de aperitivo americano para “abrirle el crisma” a Carlos Spalla, un radical recalcitrante de esa localidad del Sur provincial.

Este último recibió suturas en el cuero cabelludo y el rostro a raíz del ataque, y debió permanecer en reposo varios días para que se desinflamen los hematomas.

El agresor estuvo prófugo y se presentó en una Comisaría cinco días después de la acometida. Quedó detenido.

La contienda fue un domingo, pero para el día martes todos los medios del país replicaban las consecuencias de la feroz interna entre el macrismo y el radicalismo correntino, problema que ya lo había evidenciado el mismo gobernador Ricardo Colombi al negarle la postulación a gobernadora a Ingrid Jetter una amiga con derecho a roce de Mauricio Macri quien pretendía encabezar la nómina de la alianza Encuentro por Corrientes integrada –entre otros partidos- por el PRO y la UCR.

El intento los órganos partidarios de minimizar el enfrentamiento fue en vano. Apelaron a todas las herramientas a su alcance, y hasta negaron la envestidura dirigencial del victimario.

En un comunicado expresaron que “Alfredo Enrique Strugo se halla en uso de licencia del cargo de Presidente, por razones médicas desde el 12 de Abril de 2017, con conocimiento oportuno del Concejo Provincial del Partido”.

A pesar que la discusión podría haber sido originada por “pica política”, los referentes departamentales del PRO intentaron imponer la idea que “los hechos que involucrarían a Strugo, escapan totalmente al ámbito político partidario".

Aseguran que la los acontecimientos generados por el altercado "serían hechos de la esfera estrictamente personal y privada, objeto de investigación judicial y Strugo se encuentra a derecho, por haber comparecido en forma voluntaria”, situación por la que quedó imputado por el delito de “lesiones graves”.

Por último la nota firmada por Gustavo Solanas, Analía Bravo y Manuel Fratti, representantes del PRO esquíense asegura: “repudiamos toda intención que bajo apariencia de noticia tienda a afectar la honorabilidad tanto del Strugo –detenido en sede policial tras haber sido rechazada su eximición de prisión-, como de los demás miembros y adherentes de éste espacio político, ratificando la fortaleza de los lazos con la UCR y demás socios integrantes de Cambiemos+ECO”.

Mientras los medios locales recibían la notificación, el dirigente radical atacado asistía a una clínica para realizarse curaciones, y la UCR se llamó a silencio.