Judiciales y Policiales
Corrientes, provincia narco

Organizaciones criminales transnacionales continúan su avance en el norte correntino

Operaban en la zona rural de distintos puntos de la provincia. (Foto GNA).

Efectivos de Gendarmería Nacional, con la colaboración de Prefectura Naval realizan tareas de inteligencia en la zona rural de diferentes localidades correntinas, con el objeto de desbaratar bandas dedicadas al narcotráfico que operan en toda la región, con base en el Norte de la provincia.

Las actividades se extienden a poblados circundantes a la localidad de San Cosme, Itatí y hasta barrios de la Capital, donde, según informaron a Nova Corrientes, funcionarían células que responden a organizaciones vinculadas al tráfico de estupefacientes a Rosario, Buenos Aires, otras ciudades importantes de Argentina y se sospecha que intervienen en el envío de droga países trasandinos.

Las averiguaciones para desarticular estas bandas de narcotraficantes son como consecuencia del Operativo Sapucay ordenado por el juez porteño Sergio Torres en marzo pasado, cuando se realizaron 46 allanamientos en cuatro provincias y se detuvo a 26 individuos, todos ellos sospechados de terner vínculos con tres organizaciones que traficaban marihuana a gran escala.

En el contexto de esta causa quedaron sindicados como líderes de las organizaciones Federico Marín, Luis Saucedo y Carlos Bareiro, este último está detenido en la Unidad Penal de Resistencia y los otros dos, prófugos.

Pero la supuesta desarticulación de esas bandas tuvo como consecuencia la aparición de nuevas organizaciones que ahora pugnan por el control del tráfico y la venta de drogas provenientes del Paraguay.

Estas nuevas asociaciones estarían integradas por los antiguos colaboradores de los imputados en la causa 3002/2017 que tramita el juez Torres y que se quedaron sin "trabajo" al ser neutralizados sus líderes.

Existirían al menos dos grupos que ya estaban activos antes de marzo, cuando la Gendarmería irrumpió en Itatí, pero que carecían de vínculos con las “tres cabezas” de esas organizaciones desarticuladas.

Fuentes judiciales confirmaron a Nova Corrientes que se llevan adelante investigaciones para frenarlas y que “están en desarrollo trabajos para evitar que estos nuevos grupos crezcan. Ya detuvieron a algunos integrantes”.

Pero la sospecha es que pese a ser descubiertas, tanto Federico “Morenita” Marín como Luis “El Gordo” Saucedo podrían seguir operando desde el exterior aunque con mayor dificultad porque “se les incautó mucho material”.

Ambos están prófugos y con pedidos de arresto del juez Torres, que los investiga en el marco de una mega causa que derivó en 46 allanamientos en cuatro provincias, donde se produjo la detención de 26 individuos.

Marín además es buscado por la Justicia Federal correntina por un tiroteo con gendarmes en agosto pasado y por haber violado su arresto domiciliario por una condena fijada en Tucumán en 2013.

Oportunismo

La causa judicial por narcotráfico en Itatí fue aprovechado por el Ministerio de Seguridad de la Nación para vincular a las organizaciones criminales con funcionarios políticos, y apuntaron así contra el intendente itateño Roger Terán quien ahora permanece detenido.

Con el devenir de la investigación se descubrieron vinculos ciertos entre los integrantes de las bandas criminales y funcionarios de la Policía de Corrientes, principalmente el comisario Diego Ocampo Alvarenga a quien se le encontró dos kilos de marihuana en el cajón de su escritorio, y en uno de los bolsillos de su uniforme habrían hallado un paquete con cocaína.

Así las cosas ahora las investigaciones tratan de desentrañar los vínculos de las bandas con funcionarios del gobierno provincial, especialmente con las del Ministerio de Seguridad de la Provincia que habían respandado la gestión de Ocampo Alvarenga cuando los vecinos de Itatí realizaron una marcha para denunciar sus actos de corrupción.

Todo esto ocurre mientras continúa una investigación de la Justicia Federal de Reconquista para determinar la posible responsabilidad del gobernador, Ricardo Colombi, en la interrupción de un operativo antinarco en el que irrumpió el pasado de diciembre, en Goya.

Ese día el juez Aldo Alurralde mandó detener a dos narcotraficantes goyanos, y mandó a efectivos santafesinos para allanar dos inmuebles, pero en medio del operativo el primer mandatario provincial se hizo presente con policías correntinos, impidió el desarrollo del operativo y mandó meter preso al enviado del magistrado de la provincia vecina, un Comisario de la Policía de Santa Fe.

Por este hecho ahora podría ser imputado por un delito de acción pública.

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