Es que pese al promocionado Plan Hídrico impulsado por el Estado Nacional, en cada lluvia se registran inundaciones en áreas pobladas y los afectados suman miles.

Entre el jueves pasado y este lunes la situación fue grave en algunas localidades, principalmente en las costeras del río Riachuelo en el que se realizaron obras de dragado como parte de un programa para el que se destinaron más de 80 millones de pesos.

La intervención de las máquinas agravó la situación en la localidad de San Luis del Palmar, donde actualmente existen casi mil vecinos evacuados.

Las consecuencias de las obras de dragado ya habían sido advertidas por el representante de la organización La Alameda, José María Serbín, pero fueron desoídas por las autoridades locales. Es más, las críticas realizadas causaron su despido como referente de Defensa Civil en la localidad.

El desastre preanunciado se manifestó durante el último fin de semana, y fue reconocido hasta por el intendente de San Luis del Palmar, Ricardo Valenzuela quien sostuvo que “hay 350 personas evacuadas, y 600 autoevacuadas”.

Trató de minimizar la situación, pero sostuvo que las personas afectadas deberán aguardar la evolución climática para regresar a sus hogares, al decir que “si nos da tregua le clima en una semana o dos estas personas estarían volviendo a sus casas”.

Pese a evidenciar la catástrofe el jefe comunal desestimó el hecho que el agua llegó a superar los 4 metros. “Estamos convencidos de que el dragado funcionó, baja mucho más rápido el agua”, dijo para probar la supuesta eficacia de la inversión del Gobierno provincial.

Justificó la situación en que “cayó mucho agua en poco tiempo” y en que “faltan 21 kilómetros para que el dragado llegue a San Luis del Palmar”.

La obra del dragado tiene la desaprobación de la mayoría de los vecinos de las localidades de Riachuelo y de San Luis del Palmar, como también de las organizaciones ecologistas y Organizaciones No Gubernamentales.

Es que la obra para hacer más profundo el canal es desarrollada por una empresa privada que fue contratada en forma unilateral por el Estado provincial en lugar de otorgar esa misma tarea a la Dirección de Vías Navegables.

El problema, además es que la empresa privada cobra tres veces más de lo que hubiera necesitado la institución estatal para desarrollar la actividad.

La firma cobró 80 millones de pesos por el dragado que aún no está concluido y que generó casi mil evacuados en las últimas lluvias.

Según los trabajadores de Vías Navegables, una obra similar, pero con estudio de impacto ambiental y con garantías de que no se repetirían inundaciones saldrían con mano de obra estatal entre 15 y 20 millones de pesos.