El niño mimado de “Lilita” Carrió y virtual intendente de la Capital, Hugo “Cuqui” Calvano, defendió su decisión de ocultar los actos de gobierno al evitar dar explicaciones de sus acciones. Admitió que los medios de comunicación rara vez reflejan hechos positivos de sus intervenciones y, por ello, que hizo un pacto sólo con algunos medios a los cuales abona una suma de dinero para garantizar que se difundan sólo lo que él pretende.
Según trascendió, las explicaciones de Calvano fue ante un grupo de periodistas con los que se encontró “casualmente” en la muestra de emprendimientos cerveceros realizado el fin de semana en el Pasaje Thomas Edison, ubicado entre la avenida Costanera General San Martín y calle Padre Borgatti.
Mientras rondaban los vasos con birra fresca, el funcionario a cargo de múltiples áreas de la Comuna fue cuestionado por evitar el contacto con los medios para dar a conocer sus actos de gobierno, hecho obligatorio, según lo establece la Constitución Nacional. “Yo elijo quién me pega”, habría contestado Calvano.
En ese contexto, hasta habría sacado chapa de “multifuncionario” al advertir a uno de los presentes: “Nunca me voy a olvidar de tu publicación de la ‘Yo Voy’”. De esta manera, recordó que durante el tiempo que ejercía como concejal de la Capital se conoció la novedad que utilizaba el beneficio de descuentos en el transporte urbano de pasajeros al utilizar la tarjeta de colectivos “Yo Voy”, de uso exclusivo para estudiantes, para realizar sus visitas a los barrios.
En 2011 el referente de la Coalición Cívica dejó de cursar la carrera de Abogacía, pero continuaba utilizando el servicio de colectivos en forma gratuita al gestionarlo con su libreta de “estudiante universitario”. En 2013 viajó gratis por toda la ciudad de Corrientes hasta asumir su banca, tiempo en que continuaba como beneficiario.
Según los registros, durante su paso por el bloque Encuentro por Corrientes (ECO) –grupo aliado a Cambiemos-, usó los descuentos en el pasaje y usufructuó la gratuidad del boleto hasta dos años después de haberse graduado como abogado en la UNNE.
Pese a ser un profesional con un nivel económico elevado y provenir de una familia acaudalada, el dirigente de la Fiscal de la Moral, se benefició de los subsidios del Estado Municipal destinados a facilitar el acceso de los alumnos primarios, secundarios y universitarios.
Tras esto, el Concejo Deliberante local aprobó el pedido de informe respecto del uso que Calvano le dio a la tarjeta “Yo Voy” siendo un profesional y con demostrada capacidad económica para solventarse un gasto mínimo como el pasaje en colectivo.
Este episodio quedó grabado en la mente del actual coordinador del Gabinete del municipio y no perdona a los que hicieron pública la irregularidad. Entre copas, el funcionario habría advertido: “No voy a dar más explicaciones. Yo elijo quién me pega”. Con esto se atribuyó la facultad de cercenar la libertad de expresión y el derecho constitucional de emitir ideas por la prensa, pero sobre todo de ocultar actos de gobierno.
Pero no es el único hecho cuestionable que involucra a Calvano. También se le atribuye la facultad de manejar las cuentas estatales del municipio. El intendente Eduardo Tassano ordenó que el coordinador del gabinete y funcionario que tiene a su cargo la repartición con mayor cantidad de empleados, la mayoría de ellos familiares, administre las cuentas bancarias, hecho que debería ser una responsabilidad del jefe comunal.
Según el Boletín Oficial de la Municipalidad, el Poder Ejecutivo autorizó a Hugo Ricardo “Cuqui” Calvano a disponer de la cuenta corriente N°692378 del Banco Galicia, y las cuentas Nº 2210076028, 2210076234, 2210076131, 2210076337, 2210076440, 2210075946, 2210065321, 2210075843, 2211022781, 2210077655, 2210079364, 2210079467, 2210079673, 2210080702, 2210081505, 2210082411, 2210085514, 2210086344, 2210086241, 2210085850, 2210086550, 2210085541, 2210085644, 2210085747, 2210090294, Nº2210086138, 2210085953, 2210088465 y 2210089474 del Banco de la Nación Argentina.
Estas cuentas eran administradas en la gestión anterior por los funcionarios encargados de las finanzas municipales, pero ningún autorizado podía operar sin la firma del intendente. Al asumir Tassano, el manejo de esos fondos quedó en manos de un funcionario de segunda línea quien, a su vez, comparte la responsabilidad del manejo de dinero con Guillermo Augusto Corrales, Fernando Luis Alberto Cunha, Claudia Elizabeth Jacqueline Fernández Cogliolo y Gabriel David Menace.
Por las disposiciones municipales éstos tienen la potestad de operar con el dinero del Estado en forma autónoma –sin control del intendente- incluso con el Fondo Permanente por Nacimiento y Adopciones la Municipalidad de la Ciudad de Corrientes, destinado a atender gastos en personal Asignaciones Familiares.
La responsabilidad de manejar al dinero público le fue otorgado al funcionario que más parientes y amigos nombró al frente de la gestión. Es así que el primo del secretario de Coordinación del municipio integra la nómina de funcionarios de alto rango en la comuna. Se trata de Ernesto Calvano quien asumió al frente de la Agencia Correntina de Recaudación (ACOR), organismo encargado de cobrar las tasas municipales.
Este familiar de “Cuqui” tiene un papel importante desde marzo, porque administra el cobro de los impuestos comunales, una caja de 852 millones de pesos en recaudación propia. Otro funcionario nombrado por Calvano es su hermano Carlos, actual el director General de Fiscalización (Resolución 023 de diciembre de 2017).
También se les otorgaron cargos a Néstor Sebastián Calvano y a Juan Alberto Calvano quienes cumplen la función de secretarios privados de su hermano. Hace más de un año Néstor Sebastián y Juan Alberto fueron noticia porque junto a otro hermano cobraban abultados sueldos en el bloque del entonces concejal del Ari-Cambiemos.
En esa misma lista de asesores del entonces edil también estaban sus hermanos Diego Luís Calvano, Juan Alberto Calvano y Néstor Sebastián Calvano con sueldos superiores a los 20.000 pesos mensuales desde el año 2015.
