Panorama Político Correntino
Sin acuerdo

Intervención del PJ nacional profundiza la crisis en Corrientes

Al menos tres sectores estarían disputando espacios dentro del partido. Peligra el proyecto de "unidad". (Dibujo: NOVA).

La intervención del Partido Justicialista a nivel nacional profundizó la atomización del grupo político en Corrientes al tiempo que complicó la continuidad del “Operativo Unidad” que pretendían llevar a delante los dirigentes más cercanos al kirchnerismo.

Las divisiones se generan a partir de la existencia de al menos tres sectores. Uno de ellos tiene clara afinidad como interventores por la Justicia a nivel nacional, y serían más flexibles a un acercamiento con el macrismo.

Estos son los más antiguos del grupo político correntino, empresarios acaudalados, dueños de medios y estancias con cierta llegada al sindicalismo nacional referenciados con la Derecha.

Estos pretenden solicitar a Luis Barrionuevo, designado interventor nacional, que también se intervenga el PJ correntino y se designe como normalizador a un dirigente de la vieja guardia.

Este grupo se reuniría este fin de semana para planificar las acciones a seguir. Contarían con el apoyo de “los díscolos”, un grupo de referentes de líneas partidarias que en las últimas elecciones apoyaron la candidatura de Ricardo Colombi y los dirigentes del PRO agrupados en ECO+Cambiemos.

Estos denuncian falta de apertura en los procesos electivos internos y piden la reforma de la Carta Orgánica para garantizar el acceso de todos los sectores peronistas a los órganos en los que se toman las decisiones institucionales.

También piden que las nóminas de candidatos a cargos electivos estén integrados por todos los sectores que integran el PJ correntino.

Mientras tanto, ante la situación institucional nacional, el grupo de los actuales dirigentes institucionales, encabezados por Gerardo Bassi sostienen que se debe continuar con el proceso de conciliación entre todas las líneas partidarias a fin de preparar la convocatoria a elecciones internas.

Repudian la intervención del PJ nacional y sostienen que cada provincia tiene su identidad, por lo que consideran que se debe fortalecer la institucionalidad sobre la base de prácticas democráticas. Consideran que “se trata de una medida improcedente en lo jurídico; unilateral y arbitrario en lo institucional; proscriptivo y antidemocrático en lo político”.

Advierten que “impedir el normal desenvolvimiento institucional del Partido Político con mayor adhesión electoral del país, con mayor representación institucional en la Argentina y principal Partido opositor al modelo neoliberal que hoy administra el Estado Nacional; constituye además un atropello al Estado de Derecho y al sistema Representativo, Republicano y Democrático de nuestro país”.

Para este sector el límite es la UCR y Cambiemos. Rechazan cualquier tipo de acuerdos con los partidos del oficialismo y pretenden fortalecer al PJ como la única oposición al modelo de gobierno macrista.

Existe un grupo más neutral, el de los intendentes. Estos se mantienen al margen de la disputa interna porque están concentrados en realizar gestiones.

Es que mezclarse en una pelea partidaria les generaría desgaste al tiempo que los obligaría a tomar partido en la dicotomía kichnerismo/antikichnerismo lo que les generaría consecuencias adversas en cualquier caso.

“Estamos para gobernar, para gestionar. La cuestión K o no K no es algo que nos toque de lleno, y menos en Corrientes donde la preocupación de la gente está en poder pagar la luz y llegar a fin de mes. Es lo que piensan muchos de los intendentes ahora”, sostuvo uno de los jefes comunales del Justicialismo a NOVA.

Estos son conscientes que se debe posibilitar la unificación partidaria para organizar el PJ a fin de contener a todos los partidarios, pero advierten que “es un proceso largo y no es el momento de internas”.

Pero, existen quienes consideran que las divisiones intestinas y la intervención al Partido a nivel nacional llevarán a mal puerto al peronismo correntino, y sostienen que es necesario organizar una “alternativa superadora” para pelear espacios de poder en la provincia.

Es por ello que el ex intendente de Mercedes, Víctor Cemborain puso en marcha su proyecto político.

Lo hizo en un acto realizado en Mercedes, la noche del viernes 27 de abril en el que anunció la campaña para convertir a su partido local Cambio Solidario en una fuerza política provincial.

En la oportunidad se presentó la Junta Promotora para llevar adelante el proyecto. El sector es presidido por Cemborain, y fue nombrado Vice Presidente, Diego Caram.

Los acompañan Miguel Vallejos, Juana Gauto, Alejandro Di Fant, Adriana Vidal Domínguez, Paula Alfonso, Armando Cáceres, Carlos Ferrau, Marcos Otaño, Agustín Ramírez, Bernardo Melgarejo, Norma Avalos, Cecilia Casco y Ramona Sánchez.

Según explicó el ex jefe comunal mercedeño la iniciativa se puso en marcha porque “es momento de terminar con los políticos que llegan a un sillón o una banca y ahí se olvidan de quienes los votaron. Es momento de trabajar pensando en los que menos tienen, en salud, educación, vivienda y producción”.

Este grupo ya cuenta con el apoyo de concejales de Curuzú Cuatiá y referentes de Paso de los Libres, Santo Tomé y otras localidades del sur provincial.

Esperan llegar a las 211.323 adhesiones para inscribir la fuerza política antes de mediados del año próximo. Dentro de los 60 días posteriores al cumplimiento de ese proceso deberán afiliar a 3.382 electores para competir en las votaciones provinciales.

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