El hombre, amigo personal de Ricardo Colombi quien es el hombre fuerte de la alianza Eco+Cambiemos, presentó ayer ante el Consejo de la Magistratura de la Nación un pedido, para quedar a cargo del único juzgado de Corrientes con competencia electoral en la órbita federal: el N°1, donde renunció Carlos Soto Dávila, actualmente detenido por cobro de coimas.

El Consejo de la Magistratura mantiene reserva de este “llamativo” pedido, ya que por lo general ante la renuncia de un cargo –tras la comunicación del hecho por parte de la Cámara de Apelaciones- el organismo constitucional actúa en forma autónoma.

Es muy poco habitual que un magistrado solicite hacerse cargo de otra magistratura, aún más cuando se trata de un funcionario que tiene a cargo una jurisdicción donde se tramitan causas en las que se investigan causas de delito organizado como narcotráfico y trata de personas.

La actitud de Fresneda llamó la atención no sólo en el ámbito judicial sino que también en el político porque este juez tiene estrecha vinculación con los principales referentes de Cambiemos en la provincia, pero también con funcionarios oficialistas investigados por delitos federales.

Dudoso proceder

Gustavo Fresneda se desempeñó como secretario judicial de Carlos Soto Dávila, ex juez actualmente detenido por cobrar coimas a narcos.

Un acusado por narcotráfico también involucró a Fresneda en el cobro de dádivas para mejorar la situación procesal de personas investigadas por delito organizado, pero no se activó ninguna causa por esta acusación, pese a que en 2003 hubo otra denuncia similar que cayó por el paso del tiempo.

Pero el juez a cargo de la judicatura libreña está sospechado de haber intervenido en otros actos que podrían ser considerados corruptos. Una de estos actos tuvo su génesis cuando ejercía como abogado –antes de ser nombrado secretario judicial- se desempeñó como uno de los abogados asesores de Ricardo Colombi, ex gobernador sospechado de tener vínculos con organizaciones narco.

Este ex mandatario también estaría vinculado a una red de trata de personas que funcionaba en Paso de los Libres por medio de su amigo, José Viero, un ex jefe de Gendarmería Nacional señalado como el líder de la banda criminal.

Durante el desarrollo de la investigación judicial se conoció una llamada telefónica en la que el ex gendarme y Colombi hacían lobby para que Fresneda sea juez.

En aquel entonces Colombi era gobernador y ya tenía acumuladas cinco causas penales en el juzgado federal libreño. Su amigo, José Viero, en tanto, también era investigado en ese juzgado por la explotación sexual de mujeres en prostíbulos en Paso de los Libres.

La trascendencia de estas relaciones derivó en que se pida una investigación hacia Colombi y a Viero por “posible tráfico de influencias” debido a que se sospecha que el ex gobernador –cuando ejercía el cargo- brindó dio protección política y judicial a la bandas de trata y narcotráfico.

Esta causa, casualmente está tramitada en el juzgado que, finalmente, fue designado a Fresneda, tal como lo buscaron Colombi y Viero.

Pero el actual juez de Paso de los Libres también intervino como Secretario Judicial en una causa judicial en la que un juez ordenó la excarcelación del hijo de un Senador provincial, quien transportaba en su auto drogas de diseño y que fue retenido en un control vial.

En el fallo, el magistrado obvió tener en cuenta las cantidades de estupefacientes halladas, y justificó su decisión al considerar que se trataba de un consumidor de drogas.

En este caso, nuevamente Fresneda y Soto Dávila quedaron involucrados en un hecho de dudosa legalidad.