Fue una de las marchas de protesta más multitudinarias de los últimos cuatro años, con más de cuatro mil manifestantes. La columna de trabajadores abarcaba al menos seis cuadras, debido a que a medida que avanzaba, se sumaban más personas que adhirieron a la jornada de protesta nacional.

Entre las instituciones participantes estuvo la multisectorial 21F de Corrientes, agrupada en torno a organizaciones sociales, sindicatos, agrupaciones políticas que reflejaron a modo de denuncia, la delicada situación social y económica que atraviesa la provincia con un cartel en la que tenía escrita la leyenda "Basta de Pobreza".

El pasacalle, que ocupaba todo la cuadra, era llevado por los distintos referentes y dirigentes que participaron de la masiva movilización que se replicó desde La Quiaca a Ushuaia.

La marcha inició cerca las 10 desde la esquina de Junín y La Rioja para detenerse frente al Ministerio de Educación de la Provincia donde se encontraba reunido el gobernador Gustavo Valdés con los funcionarios de esa cartera de gobierno.

En la voz del secretario de gremio de los docentes Suteco, Fernando Ramirez, se efectuó un encendido discurso contra las políticas del Gobierno de Eco-Cambiemos en materia educativa.

La marcha continuó hasta la Casa de Gobierno donde diferentes dirigentes barriales y secretarios de sindicatos expresaron sus demandas, en torno a una provincia sumida en la pobreza extrema.

Mientras esto ocurría, se paralizó la atención en los bancos privados y en el de La Nación Argentina, mientras que sí hubo prestación en el Banco de Corrientes.

El impacto en las escuelas fue aproximadamente del 50 por ciento, debido a que el gremio del Sindicato Unico de Trabajadores de la Educación se sumó a la medida de fuerza convocada por la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina.

Los colectivos urbanos funcionaron con dificultad, pero el servicio interurbano Chaco-Corrientes se resintió debido a que los colectivos fueron atacados con piedras en la ciudad de Resistencia, lo que llevó a detener la prestación.

El sector más convocante fue el de la Central de Trabajadores Argentinos. El referente de este sector, Feliciano Romero sostuvo en la marcha que "más allá de los matices que puedan existir, estas manifestaciones representan la unidad para decir basta de ajuste, basta de cesantía, basta de miseria. Es la unidad de la clase trabajadora; debemos unirnos más allá de nuestras diferencias para arrancar de nuevo. Cualquiera sea el gobierno que venga se va a encontrar con un vacío tremendo más la deuda que tenemos que pagar".

Tras la manifestación, la más importante de los últimos tiempos en Corrientes, ninguna autoridad gubernamental se refiró a ella, aunque contó con la participación de referentes de los partidos de la oposición.