El hombre justificó que se hallaba en actividades debido a una situación extraordinaria, pero igualmente se lo privó de la libertad en una polémica y arbitraria medida.

En tanto, las empresas de remises anunciaron que aumentó en 80 por ciento la demanda, pero que igualmente habían tomado la determinación de evitar que los conductores salgan a la calle.

Respecto a esto, Juan Castillo, presidente de la Asociación de Remiseros de Corrientes, comentó que se realizó “un pedido voluntario” a las empresas y que la mayoría se adhirió a la suspensión del servicio. Recordó que algunos de los choferes se ofrecieron como conductores si el sistema de salud lo requiere para eventuales emergencias. “La idea es priorizar la salud”, dijo, al punto de recalcar que “es preferible parar ahora a tener que hacerlo después por enfermarse y que sea más grave”.

Desde ese sector aclararon, sin embargo, que “hay trabajadores que por su cuenta deciden hacer viajes especiales con clientes, pero en general lo que definimos es que las bases estén cerradas”.

Mientras tanto, del Gobierno de la provincia anunció que los conductores de remises recibirán 7.500 pesos de ayuda económica, pero no podrán circular.