Judiciales y Policiales
Contenido dudoso

Juez verifica llamada telefónica de supuesto narco a una radio

Efectivos de la Gendarmería se reunirán con el magistrado para analizar el contenido del audio.

Durante la jornada de hoy, el juez federal Carlos Soto Dávila tendrá una reunión con un grupo de peritos de la Gendarmería Nacional para estudiar la autenticidad del audio de una entrevista difundida en un programa de radio en el que un supuesto narco buscado por la Policía Internacional relató cómo fue la balacera que protagonizó con los efectivos de esa fuerza de seguridad.

La autoridad judicial busca establecer con métodos técnicos la autenticidad de la llamada telefónica realizada este miércoles supuestamente por un narco requerido por la Justicia identificado como F. S. M., alias “Morenita”, a una audición de Radio Sudamericana. El prófugo sería el líder de una organización delictiva que provee de estupefacientes, entre otras, a la banda narcocriminal de “Los Monos”de Rosario.

Contenido del audio

En esa charla se habla de un tiroteo ocurrido el viernes pasado aproximadamente a las 22 en el centro de la ciudad de Corrientes, en la que Marín evitó ser detenido al enfrentarse con al menos doce gendarmes a quienes intentó embestir con su auto.

En la maniobra, chocó al menos diez veces con su rodado, un Volkswagen Golf, a dos patrulleros de la fuerza de seguridad para abrirse paso y escabullirse. En esa huida habría recibido un disparo.

Fuentes oficiales comentaron a Nova Corrientes que “efectivos de la Gendarmería se reunirán hoy (jueves) con el magistrado para escuchar ese audio, y se le solicitará autorización para avanzar en una serie de peritajes y medidas para saber si realmente se trató de un diálogo con el prófugo, pero también para evaluar posibles responsabilidades de ese medio de comunicación en relación al entorpecimiento de las investigaciones que se llevan adelante”.

Le achacan a la emisora haber evitado denunciar el hecho a las autoridades judiciales, y que se imposibilitó así la realización de intervenciones tendientes a establecer la ubicación del delincuente.

La llamada telefónica en cuestión fue difundida el miércoles a la tarde. En la misma se escucha la voz de un hombre que se hizo llamar “José” y que se atribuye el altercado con la Gendarmería ocurrido en la esquina de las calles Lavalle y Córdoba el fin de semana pasado.

En el inicio de la charla se identificó como “el supuesto narco que dicen que tuvo la balacera con la Gendarmería el viernes a la noche cerca del hospital J. R. Vidal”.
Dijo que tras el incidente salió del país para evitar que lo atrapen. “En este momento estoy en Paraguay, y no escapé de nadie”, afirmó.
Explicó que está en ese país porque “vivo en Paraguay porque tengo mi familia en Paraguay, también viven mis hermanos, todas las semanas vengo, y así como estoy herido no sé si volveré a Corrientes. Mi sobrina me está curando”.

Versión del prófugo

Durante la audición de radio, “José”, seudónimo elegido supuestamente por “Morenita”, relató su versión de cómo fue el enfrentamiento con los gendarmes. “El viernes a la noche estuve con mis hijos y les iba a llevar a un pelotero, fui a un kiosco y los subo a un remis”.
Aseguró que “ellos (sus hijos) se dirigen hacia el pelotero, y subo a mi auto para seguirlos. Pero fue cuando entró de frente una camioneta de contramano y del lado trasero se cruza otro auto”.

En esas circunstancias “se acercan cuatro tipos que empiezan a pegar con palos a los vidrios de los autos y otros cuatro tipos que empezaron a disparar a lo loco”. Dado esto, “me asusto, y con mi compañero los chocamos”.

Según su relato, los hombres “nunca se presentaron como gendarmes, estaban de civil, y lo único que hacían era disparar y pegar con un palo al vidrio”.
Ante esto, “chocamos a la camioneta y logramos correrla a un costado y escapamos. Hicimos cuatro cuadras, abandonamos el auto, subimos a un remis y nos fuimos. Dijo que tuvo que frenar la marcha allí porque “se me apagó el auto”.
Según contó, “lo que pasó es que desde media cuadra me disparaban y fue que me impactó un tiro en la mano, y mi amigo recibió otro disparo en un brazo”.
Reconoció haber huido pero afirmó que “no hubo una persecución” debido a que, según calcula, “no me pudieron seguir porque la calle en la que me encerraron era muy chica y no podían dar vuelta el auto”, consideró.
Justificó su escape al decir; “me asusté mucho porque no se presentaron; y si hay cámaras quiero que saquen las grabaciones y verán el show de los tipos que me tiraron y que no sé quiénes son”.

Agregó que en esa oportunidad estaba desarmado. “Quiero aclarar que nosotros no usamos armas, no tiramos”, y para que se comprueben esas circunstancias “me gustaría que se hagan las pericias al auto como se debe, porque todos los disparos entran al auto, y ninguno sale y no hay casquillos en el auto”.
Criticó duramente los textos publicados por un diario capitalino. “No es cierto lo que publicó el Diario Época. No somos peligrosos, no teníamos ametralladoras, no teníamos armas, y no disparamos”.

“Nunca sacamos un arma y no intentamos disparar a la gendarmería, porque no usamos armas, no me gustan las armas, y nunca disparé a nadie”, reiteró para luego agregar que “mucho menos abusaré de tirar a un inocente, a un policía o a un gendarme, jamás”.

Por último, negó el liderazgo de una organización narco, aunque reconoció: “tengo causas pendientes, no soy ningún santo”.
En este sentido, advirtió que “tuve problemas con la justicia, no lo niego, pero no soy un gran narcotraficante y no soy jefe de nadie. No vendo drogas. En algunos años habré hecho algo, pero no vendo drogas. No soy ni jefe de mi familia, solo trato de educar de la mejor forma a mis hijos”.

Un tipo común

Respecto a su actividad laboral dijo ser “comerciante”, propietario de una ferretería. Y también se definió como “una persona común y corriente que le gusta salir con su familia, jugar al fútbol, las carreras de caballo y pescar”.
Pero también reconoció que “tuve causas judiciales, pero no soy un asesino, nunca disparé a nadie ni lastimé a nadie.

Respecto al prófugo, un alto mando de la Gendarmería Nacional calificó a “Morenita” como “peligroso y aguerrido”. “Nunca hemos visto una persona tan decidida a escapar y tan temeraria”.

En tanto, abogados que lo asesoraron años atrás coincidieron que “estuvo involucrado en causas por hechos violentos, incluso violencia contra su pareja. Fue baleado en otras oportunidades y herido en peleas”.
Tiene desde 2004, cuando con 17 años asaltó a un legislador. Actualmente es buscado porque violó la prisión domiciliaria que le otorgó un tribunal 2015 en una causa por tráfico de drogas. Además, es requerido por jueces federales de Chaco, Formosa, Tucumán, Corrientes y Santa Fe.

Lectores: 716

Envianos tu comentario