Una mujer se presentó en el Juzgado de Instrucción y Correccional de Esquina y manifestó ser la concubina de Rogelio Schweig (47), el conductor de la camioneta que junto con su esposa Elena Dzikovski cayó a las profundas aguas del arroyo Guazú en la Ruta Nacional Nº 12, en cercanías a la localidad de Esquina y falleció.

Se trata de Rosa Pérez, quien dijo que tiene cuatro hijos menores con la víctima. Junto con su abogado, el doctor Pedro Canteros, anunciaron que se constituirán como querellantes en la causa.
“En esta oportunidad vine acompañando a la señora Rosa Pérez y a su hermana, Miriam, en carácter de abogado de la familia, acompañándola para realizar algunos actos judiciales de conocimiento público y que es de nuestro interés y básicamente a acompañar este hecho tan lamentable que le tocó vivir a toda la familia”, dijo Canteros en declaraciones a la prensa.
“Nosotros hoy nos presentamos ante el Juez quien se portó muy bien y nos brindó todo tipo de ayuda e información que nosotros solicitamos. Fueron muy eficientes con nosotros. También quiero aprovechar la oportunidad para agradecer al Municipio, al señor Intendente y a sus colaboradores. Sin ellos no hubiera sido posible no solamente quizá nuestra presencia aquí, sino la participación y el conocimiento de la concubina del Sr. Rogelio Schweig y obviamente de toda la estadía, de todo el apoyo moral, económico, porque ellos son de escasos recursos, para que pudieran solventar sus gastos”, recalcó el abogado.
“La señora es su concubina durante mucho tiempo y con ella tuvo cuatro niños que son menores de edad. La idea primaria actualmente es que los chicos, eventualmente si en algún momento correspondiera, tuvieran alguna indemnización, ya que no van a tener al papá con ellos y él era el sostén de la casa, le proveía alimentos y de todos los gastos necesarios para la educación, que por lo menos los chicos pudieran contar con una casa, ellos no tienen casa propia” expresó el abogado.
“Rosa no viajaba con Rogelio, ella se encontraba en su casa a 850 km de aquí, en una localidad que se llama Andresito. Ella estaba allá en su casa, con sus niños. Cuando se entera lo primero que atina es viajar hacia aquí, vino con alguien que le trajo y desde ese momento tuvo la dicha de conocer a la gente del municipio que la asistió en todo momento y que aún siguen prestando colaboración con todos ellos”.
En tanto, Rosa Pérez manifestó que compartió vida en común con Rogelio durante “14 años y tenemos cuatro nenas”. “Fue muy difícil para mí, para mis nenas, fue muy difícil todo”. “Lo que buscamos es Justicia y más que nada saber que hoy, de aquí en adelante quedan cuatro niñas sin un papá, sin alimentos, sin cuidados, sin amor, sin cariño”, explicó el letrado.
“Es una falta irreparable. La niña mayor, que es la más apegada al padre, estuvo en todo momento junto con su padre cuando llegó en cuerpo. El fondo de esta cuestión es emocional también. Lloró mucho por su padre, lloró mucho sobre su cajón, era la hija preferida del papá y esas cosas son muy difíciles de superar. Obviamente también por la madre y esos son momentos difíciles más allá que la ley no tenga otro modo de reparar el daño que pecuniariamente y quien sea responsable que le toque resarcir. La idea es que las niñas en adelante tengan vivienda propia, esa es de algún modo la Justicia que se busca”, finalizó el doctor Canteros.