Justamente la licitación para la obra de la calle Colón la ganó la firma que preside Chamas y con anterioridad a que se sepa esa resolución, los ciudadanos libreños mostraron su preocupación por la participación del polémico empresario y entre risas manifestaron; "¿No hace un metro de red de agua y se piensan que va hacer un metro de vereda o asfalto?".

En los pasillos de la Municipalidad comenzó a correr el rumor que fue el mismo Ascúa quien recomendó realizar el trabajo con la compañía de la cual es el titular el hombre que hasta hace un tiempo era su jefe en Aguas de Corrientes SA. Mínimamente nos encontramos ante un claro caso de conflictos de intereses y derivación de obras por amiguismo.

Los cañones apuntan al intendente libreño por su responsabilidad a la hora de cerrar un acuerdo extraño y polémico por donde se lo mire. Se trata de la construcción de la primera peatonal de la ciudad, y desde las redes sociales hicieron hincapié en que los fondos se lograron gracias a que el proyecto “fue destrabado por gestiones de Ascúa en 2020 con el equipo del presidente Alberto Fernández, y con un crédito del BID”.

Otro dato a tener en cuenta que desnuda las burdas artimañas entre el empresario y el jefe comunal es que, hace un tiempo Chamas habría contratado un avión privado para buscar a Malena Galmarini, la mujer de y titular de AySA, para llevarla a recorrer obras de la provincia. Los rumores indican que se estaría armando una mesa de la obra pública entre los allegados a Massa y Chamas en la cual participan intendentes como Martin Ascúa.