- No nos queda otra que unirnos o quedar como muertos políticos. – Aseveró uno de los presentes, mientras se frotaba los ojos y suspiraba desganado.

- ¡Siempre terminamos comiéndonos sapos! ¡No tenemos opción! – Le contestó un histórico militante del Partido Justicialista (PJ).

La reunión tenía que comenzar en punto. Sin embargo, mi amigo Casimiro Lateta me señalaba que no se daba con el inicio porque aún quedaban unas sillas vacías reservadas (según anónimos indicaban que estaba confirmada la presencia de dichos dirigentes de peso). Resultaba que ningún camporista llegaba, amén de que no contestaban las llamadas telefónicas y en WhatsApp solo se marcaba una tilde.

- ¿Comenzamos sin José “Pitin” Aragón y Marlen Gauna? – Miraba y se preguntaba a sí mismo un organizador importante, desde la puerta de Espacio Andes. Con el celular pegado a la oreja y con alguna grosería al aire.

Como tomé mucha agua, preferí hacerme un tiempo menor para poder ir al baño. De repente, unos hombres referentes del justicialismo entraron charlando e ignorando mi presencia. Y hasta quizás sin saber quién soy.

- Estos 2 andan todavía de gira por el interior y piensan que no tenemos peso. O que no nos necesitan. Hay que marcarles la cancha y presentar interna. – Canchero comentaba uno de los peronistas más recalcitrantes y ortodoxos.

- Quedó claro que no nos tienen en cuenta. Si arriba todo está podrido, imagínate que nos queda al interior. – Se lavaba las manos y cada tanto miraba de reojo no queriendo largar ni una palabra de más. Se daba cuenta un poco que paraba la oreja yo.

Se entiende que fue una mojada de oreja camporista el “despegarse” del albertismo (o rejunte del peronismo federal no K). Según pude entender, el PJ correntino no quiere entrar en discusión ante una posible interna en el Frente de Todos, pero La Cámpora ya dejó claro su postura de “medirse” dentro del terreno electoral.

Ahora bien, si de pesos pesados hay que hablar, estuvieron los dirigentes históricos en la reunión como Jorge Romero, Fabián Ríos y Nancy Sand, así como los “nuevos” Martin Ascua y Carlos “Tata” Sananez. Respecto a este último, tuvo el asiento de compañía vacío con el nombre de Martín Barrionuevo y, por el fondo, brilló por su ausencia el espacio de Camau Espíndola, senador nacional desde 2015 quien se había despegado el último tiempo de la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner.

El susurro con la palabra “faltazo” fue de lo más difundido en el “boca a boca”. Los medios presentes no lo sacaron más allá de esa reunión. Tampoco se nombró en la reunión (evitaron denominaciones comunes como “La Cámpora”, “kirchnerismo” o hasta alusiones a “La Jefa”). Se sabe que la interna tiene más posibilidades que una “unidad” ya echada a un costado y buscando revivir a la fuerza.

¿Quién es?

Soy yo.

¿Qué vienes a buscar?

A ti.

Ya es tarde.

¿Por qué?

Porque ahora soy yo la que quiere estar sin ti.