"Este es el camino, por acá es donde vamos”, dijo el presidente en los actos por el 150 Aniversario del Colegio General San Martín.

En su discurso, el jefe de Estado pidió que lo evalúen con el voto en base a la lucha contra la pobreza. Lo dijo justo en la provincia en la que existen 544.000 habitantes que sufren esa condición.

Sin sonrojarse, el mandatario -procesado en 252 causas penales y con vínculos con organizaciones de trata de personas- indicó que “queremos transmitir el entusiasmo, el optimismo, porque tenemos las ganas de seguir transformando la Argentina”.

De hecho, la transformación que lleva adelante es tangible. Desde que asumió, en la provincia de Corrientes existen 187.000 nuevos pobres y 82.000 nuevos indigentes.

Luego, Macri volvió a pedir el voto en otro acto, en el barrio Santa Catalina, un emprendimiento puesto en marcha por el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y con la intendencia del peronista Fabián Ríos, pero que el gobierno actual pretende atribuirse.

En ese contexto, dijo: “Les pido tengan esperanza y energía para emprender la segunda etapa”, al ratificar su intención de ser reelecto.

La visita del actual gestor de gobierno en la Casa Rosada a la provincia de Corrientes había iniciado el jueves, cuando llegó con su esposa Juliana Awada y fueron recibidos por el gobernador Gustavo Valdés.

Luego, ambos mandatarios y sus esposas cenaron juntos en un hotel y al otro día participaron de varios actos en los que el Gobierno provincial movilizó, con recursos estatales, a militantes del interior de la provincia y de los barrios periféricos.