El objetivo de la Asociación es brindar atención primaria de la salud a personas en situación de vulnerabilidad o difícil acceso al sistema de salud, a través de alianzas y mediante un equipo de trabajo diverso y solidario, colaborando además con el sistema de salud pública, ya que el mismo se encuentra colapsado.

En diálogo con la sección Perfiles Urbanos de NOVA, la doctora Diana Lancelle contó cómo nace la Asociación Civil que por año brinda atención médica solidaria entre 800 y 1000 personas en la Parroquia Virgen de Itatí.

“La Asociación Civil nació en Buenos Aires en el año 2014 de la mano del doctor Mariano Masciochi (cardiólogo), quien, motivado por su espíritu solidario, comenzó a brindar atención médica en forma gratuita a personas en situación de vulnerabilidad en la parroquia de su barrio", comentó la pediatra.

Y agrego: "Con el tiempo se fueron sumando más profesionales y voluntarios, de esta manera la Asociación fue creciendo y extendiéndose a otras provincias. Corrientes fue una de ellas, que se sumó a esta acción solidaria en el año 2019".

"Ahora se cumplen 6 años de este voluntariado que funciona en la Parroquia Virgen de Itatí. Además, ahora este voluntariado se sumó al grupo Buen Samaritano y junto a ellos se brinda atención a las personas en situación de calle que asisten a las parroquias San Francisco y San Juan Bautista”, expresó.

Y destacó: “Las atenciones siempre se destacan por la cercanía con las personas, la empatía, la escucha, la amorosidad, brindando no solo atención médica, sino intentando colaborar en el bienestar de las mismas desde un amplio sentido humanitario, solidaridad e idoneidad. Pero quiero aclarar que nuestra función no es competir con el sistema de salud pública, sino colaborar siendo un complemento del mismo”.

En cuanto a qué la motivó a sumarse a esta Asociación Civil sin fines de lucro, la pediatra expresó: “Durante mucho tiempo sentí la necesidad de aportar mi granito de arena a la sociedad y sobre todo a las personas en situación de vulnerabilidad y no encontraba el lugar. Hasta que en el año 2018 vi una nota en la televisión al doctor Mariano y me encantó la idea de poder aportar mi tiempo desde lo que amo hacer, ya que soy médica pediatra".

"Me llevó un tiempo decidirme, ya que entendía que el compromiso era un pilar fundamental para iniciar y luego de hablar con mi familia, quien me apoyó desde el principio, fue entonces que me comuniqué con el doctor Mariano, para replicar en mi ciudad las actividades abriendo una sede en Corrientes”, recordó emocionada.

“Ser representante de esta Asociación en mi provincia me enorgullece y descubrí además que existen muchas personas solidarias, con ganas de colaborar con el prójimo desde su lugar y eso en todos estos años me llenó de felicidad y me sorprendió gratamente. Pasaron muchos profesionales de la salud y voluntarios, quienes se destacaron por su entrega y compromiso y sobre todo el entusiasmo y la empatía que entregaron en cada jornada de trabajo”, remarcó.

Y prosiguió: “Fue así que en el año 2019, luego de formar un pequeño equipo con un enfermero (Felipe) y dos voluntarias, de encontrar la parroquia que nos brindó un espacio, fuimos armando con donaciones e iniciamos las atenciones en la Parroquia Virgen de Itatí de la ciudad".

"Porque no tenemos sede propia, pero atendemos en esa parroquia, ya que el padre Leonardo Guedes nos ayuda cediéndonos un espacio para las atenciones muy generosamente. Y bueno, así en tiempo récord se sumaron profesionales y voluntarios no médicos y fuimos sumando atenciones”, relató la pediatra.

La pediatra contó que el nombre de la Asociación, ¿Me regalás una hora? “surgió como una invitación o un llamado a quien se quiera sumar al trabajo solidario que realizamos, teniendo en cuenta que cada uno de los voluntarios donamos lo más valioso que tenemos, que es nuestro tiempo”.

Aporte solidario

En este contexto, la doctora Lancelle hizo un llamado a la solidaridad y mencionó: “Entendemos que la atención médica sin poder brindarles la medicación para su tratamiento quedaría incompleta; por lo que recibimos donaciones de medicamentos de visitadores médicos, pero actualmente estamos necesitando la colaboración de la comunidad porque nos encontramos en falta”, requirió la médica, apelando a la solidaridad de la comunidad correntina a aportar su granito de arena para continuar atendiendo a las personas en estado de vulnerabilidad.

La Asociación Civil ¿Me regalás una hora? Corrientes no recibe ayuda de ninguna institución. “Nos abastecemos por nuestros propios medios y si es necesario hacemos campaña de donaciones. Somos apolíticos y arreligiosos”, remarcó Lancelle.

Aunque aclaró: “Somos apolíticos, pero de igual manera en algunas oportunidades solicitamos medicamentos a Salud Pública sin inconvenientes y en las épocas que hacíamos operativos barriales también nos facilitaban vacunas para poder suministrarlas en dichos operativos, todo bajo estricto control y por profesionales idóneos”, destacó la pediatra.

Atención y voluntarios

La cantidad de voluntarios, tanto profesionales de la salud como voluntarios no médicos, fue variando a través de los años.

En la actualidad son 30 voluntarios que brindan atención médica solidaria en la Parroquia Virgen de Itatí de la ciudad: los días lunes a las 12 horas reciben atención clínica con el doctor Morales, los martes a las 16 horas atención pediátrica con la doctora Lancelle, los viernes a partir de las 15 horas brindan atención ginecológica con la doctora Ríos Navarro y los sábados a las 10 horas brindan atención psicológica con la licenciada Rabez. Las atenciones son por orden de llegada.

Además, la Asociación Civil se sumó al grupo Buen Samaritano y junto a ellos se brinda atención los días jueves a las 19 horas en la Parroquia San Juan Bautista con la doctora Macarrein y los viernes a las 19 horas en la Parroquia San Francisco con la doctora Andrades.

Colaborar desde lo que uno sabe hacer

La pediatra Diana Marina Lancelle colabora desde lo que sabe hacer y ama, “que es la mejor manera de ayudar con amor al prójimo que lo necesita”, dijo.

Ella reparte su tiempo entre su vida familiar y profesional, ya que es casada, tiene tres hijos y desde hace dos años está certificada como coach ontológico especialista en coaching sistémico, acompañando a las personas desde esta disciplina que la apasiona.

Además, trabaja desde hace 20 años en la Justicia como médica forense, formando parte del Instituto Médico Forense de la provincia, por lo cual no tiene actividad privada como médica pediatra. Desde el 2019 es la representante en la provincia de la Asociación Civil.

En cuanto a su rol solidario, destacó: “Siempre resaltamos que la tarea que realizamos en la Asociación nos devuelve mucho más de lo que damos, ya que con solo ver que podemos acompañar y asistir o aliviar el dolor del más vulnerable, no solo desde la atención médica, sino destacándonos por el trato humano, el interés por escuchar su realidad. La que muchas veces no podemos cambiar, pero poder acompañarlos sabiendo que si está en nuestras manos haremos lo que sea por aliviarlos, y ya nos sentimos ambas partes satisfechas”.

Por último, la pediatra expresó: “Desde mi lugar quiero invitar a todos a que, desde una pequeña acción hasta la más grande, siempre podemos ayudar a aliviar a alguien que se encuentra en situación de vulnerabilidad. No me gusta decir ‘ayudar’ ya que esa palabra le quita a la otra persona el poder de reinventarse, me gusta más decir ‘acompañar’ a un otro a mostrarle que puede salir adelante, con ‘ayuda’ que construye ya que solos nadie puede".

"Estamos convencidos de que el tiempo que se le dedica a otra persona es el tesoro más grande que podemos ofrecer, con actos de generosidad y amor hacia el otro. La invitación es ¿Me regalás una hora? Y como dice la Madre Teresa de Calcuta: ‘Que nadie se acerque a ti sin que al irse se sienta un poco mejor y más feliz’”, concluyó.